jueves, 29 de julio de 2010

Viva la patria.

Esta encuesta se publicó ayer en la sección Deportes online del diario la Nación




Y este era el resultado ayer alrededor de las 22hs.

















Esta encuesta habla de Maradona y nos muestra nuestras opiniones.
Ahora, también, esta encuesta habla sobre nosotros, los que votamos.
¿Qué dice esta encuesta sobre nosotros, los argentinos?

Esta encuesta trata entre otras muchas cosas de cómo tratamos a nuestros ídolos, de el poder de los medios sobre las subjetividades, de racismo y discriminación. De lo que somos como Nación. De amores, de odios, de frustaciones personales y colectivas.
Para muchos argentinos, me incluyo,  el país es una mezcla de lo que Sarmiento alguna vez llamó Civilización y Barbarie. La magistral visión de Sarmiento en el concepto, la categoría, para definir nuestra sociedad, quizás  nos abarca a cada uno de nosotros. Cada uno de nostoros es en su invidualidad, Civilización y Barbarie. 
Todos somos un poco  pro Maradona y un poco anti Maradona según las circunstancias. Lo que nos falta averiguar es de que lado está la civilización y de que lado la barbarie.
Por las dudas, yo, me quedo, siempre, del lado de la barbarie.
La civilización se la dejo a Mirtha, Susana, Joaquín y Magdalena.


miércoles, 28 de julio de 2010

Historia inconclusa














Para los que vivimos en Buenos Aires ayer se emitió  por cable, el último capítulo de las serie FLASHFORWARD.  Era el gran tanque de la cadena norteamericana ABC para el año 2009/2010 con un gran elenco y un formidable presupuesto. Los niveles de audiencia no acompañaron en Estados Unidos (parece que una serie que tiene menos de 19 millones de espectadores en cada emisión se cancela automáticamente) y la serie no tendrá una segunda temporada. Ahora, por lo visto ayer, parece que la decisión de no continuar con la serie el año próximo se tomó después de terminar las grabaciones de los 22 capítulos porque la serie concluyó con un final totalmente abierto y sin aclarar en lo más mínimo alguno de sus interrogantes.
O el éxito de Lost contagia,
o importa más el viaje que la llegada,
o sólo importa contar sin importar el final,
o es sólo eso,  un tramo de vida.

O se cagaron en todo y en todos.
Usted elija el final que más le guste.

lunes, 26 de julio de 2010

58 años sin esa mujer.



















"Aparento vivir en un sopor permanente para que supongan que ignoro el final... Es mi fin en este mundo y en mi patria, pero no en la memoria de los míos. Ellos siempre me tendrán presente, por la simple razón de que siempre habrá injusticias y regresarán a mi recuerdo todos los tristes desamparados de esta querida tierra."

"...Ha llegado la hora de la mujer que comparte una causa pública y ha muerto la hora de la mujer como valor inerte y numérico dentro de la sociedad. Ha llegado la hora de la mujer que piensa, juzga, rechaza o acepta, y ha muerto la hora de la mujer que asiste, atada e impotente, a la caprichosa elaboración política de los destinos de su país, que es, en definitiva, el destino de su hogar. Ha llegado la hora de la mujer argentina, íntegramente mujer en el goce paralelo de deberes y derechos comunes a todo ser humano que trabaja, y ha muerto la hora de la mujer compañera ocasional y colaboradora ínfima. Ha llegado, en síntesis, la hora de la mujer argentina redimida del tutelaje social, y ha muerto la hora de la mujer relegada a la más precaria tangencia con el verdadero mundo dinámico de la vida moderna."







El 26 de Julio de 1952, murió el ser humano más peronista de todos.
El más cabecita negra, el más descamisado, el mas peroncho de todos los peronchos.
Y no fue Perón. 
Fue una mujer.
Esa mujer


martes, 20 de julio de 2010

Microcuentos

Recomiendo este blog dedicado exclusivamente a la microficción.

Internacional Microcuentista
Una Revista de Microrelatos y otras brevedades.


Se pueden leer relatos como este:

El enunciado era aproximadamente así: Si A es igual a B, y B es igual a C, entonces C es igual a A, ¿correcto? Bien. Esto es lo que yo llamo un pensamiento rigurosamente lógico; por tanto, ya sobre suelo firme, avancemos: si yo amo a mi esposa, y mi esposa ama a su bella hermana, entonces no comprendo por qué reacciona de ese modo.

Juan Romagnoli, Universos ínfimos, Ediciones Tres fronteras, Murcia, 2009. 

viernes, 16 de julio de 2010

DIOS ES PUTO

Los fieles rezaron, levantaron plegarias al cielo, se armaron para una guerra santa. Dios escuchó a todos, pensó y dudó. Finalmente se decidió.
Hay algunos pequeños momentos en la vida en que uno se siente orgulloso del lugar en donde vive. Este es uno de ellos.
Gracias a todos los que, desde el estrado o desde el rincón más alejado, lo hicimos posible.

lunes, 12 de julio de 2010

España, una muy buena noticia

Por César Luis Menotti

12 de Julio de 2010 | 9:11

El primer Mundial desarrollado en continente africano dejó por encima de todo la incuestionable e inédita consagración de España como campeón. Una muy buena noticia para el juego. No hubo muchas más y sí demasiado por discutir. Mientras se iban sucediendo los partidos tuve la sensación de que son demasiados los equipos que están demás, que el buen juego es por estos tiempos virtud de muy pocos y que el espectáculo y la sobrecargada lucha mediática siguen gozando de muy buena salud.

Así se utiliza un Mundial: el que gana vende, el éxito no se analiza. Así sucedió hace cuatro años en Alemania, cuando se dijo que el fútbol era de Italia, aunque haya sido uno de los que peor había jugado. Llovieron los elogios al campeón, que la disciplina táctica, que eran especialistas en este tipo de competencia…Las voces del utilitarismo volvieron a escucharse fuerte en Sudáfrica. Cayeron con todo el peso de su miserable condición encima de España y Alemania, coincidiendo con sus derrotas en la fase de grupos.

Pero aquellas fueron derrotas en el resultado, no en el juego. El tiempo puso las cosas en su lugar, Serbia y Suiza se fueron temprano a casa, sin siquiera superar la primera instancia, y españoles y alemanes, auténticos defensores de la idea de jugar para ganar jugando, se encontraron y protagonizaron el mejor partido del Mundial. Inolvidable. Ganó España. No perdió nadie. En el juego ganamos todos.

Me pregunto qué dirán ahora aquellos que amparados en su cobardía e ignorancia se atreven a decir que “cuando hay mucho en juego es muy difícil jugar bien y brindar buenos espectáculos”. Muchachos… les recomiendo humildemente, ustedes siempre tan afectos al uso de videocaseteras o compacteras, dejen a un costado por dos horas los pizarrones magnéticos, la pelota parada y disparada, y tómense la molestia de ver (y disfruten) un señor partido de fútbol, entre dos señores equipos como España y Alemania que, si no recuerdo mal, se jugaban poquito, apenas un boleto a la final de un Mundial…

En su camino al título, España mostró una capacidad estratégica como hace tiempo no se veía y asumió la búsqueda del resultado desde dos facetas fundamentales: pressing corto para recuperar, poniendo al equipo en campo contrario, asumiendo responsablemente esta estrategia de recuperación de la pelota. Con ella en los pies, entonces el comienzo de la elaboración, que no es otra cosa que buscar el tiempo y espacio que le sea más favorable.

La pelota feliz y bien tratada va de un pie a otro, corto, repetido, ancho para poder ser profundo, si se puede en uno, o en dos, o en 10, o 20. Lo que haga falta. Todos los toques necesarios y el permanente compromiso de participación no sólo de Xavi, Iniesta, Pedro, Busquets, sino también de los cuatro defensores. Todos a jugar para decirle a Villa la mesa está servida.

El fútbol es espacio, tiempo y engaño pero además qué lindo es jugar con la pelota, si hasta parece que uno no se cansa nunca. Y qué feo es correr detrás de la pelota.

Cuando se trata de forzar la acción, España tiene todas las variantes. Nunca intenta dividir, prefiere adueñarse del juego para encontrar la zona de definición. También tiene la posibilidad de generar acciones forzadas desde la habilidad individual.

Hay otras virtudes notorias en esta Selección española: tiene precisión y pase-gol, muy buena media distancia y enormes pequeñas sociedades como Piqué-Puyol o Iniesta-Xavi. Es imposible para los especialistas en números de teléfono saber cómo juega España. Se me ocurre que casi como el Barcelona. ¿Y cómo juega el Barca? 1-2-3-4-5-6-7-8-9-10-11, 8-9-10-4-5-8, 5-4-1-0… Ah! Todos estos números tienen una misma característica: España juega muy bien al fútbol, después marque los números que quiera. Este equipo español deja al mundo del fútbol un mensaje claro y preciso: también se puede ser campeón del mundo jugando bien. La final fue durísima para España. Holanda le propuso un no-juego, interrumpió con una agresividad siempre al filo del reglamento y muchas veces contó con la complicidad del árbitro, de pésima actuación. Así sostuvo el no-juego, lo llevó a España, lo arrastró a jugar el partido que Holanda quería. Pero medio equipo amonestado y un expulsado fue un costo demasiado alto para los holandeses. Sumado a que ya España había encontrado sintonía fina en Fábregas e Iniesta, las acciones se volcaron en favor del equipo más generoso, más valiente, ese que siempre buscó la victoria. España fue lo mejor del Mundial. Un justo campeón. Alemania hubiese realzado esta final, sin dudas. Holanda perdió otra final, la tercera en su historia. En las anteriores (1974 y 1978) lo hizo tratando de imponer el protagonismo, condición que ayer en Sudáfrica regaló.

(c) César Luis Menotti 2010

Distribución exclusiva a cargo de Global Media Services (gms), una empresa de la agencia alemana de prensa DPA.

martes, 6 de julio de 2010

Hermoso día de invierno






























Hermoso día de invierno en Buenos Aires. Mucho viento, del sudeste, el río crece, alardea con desbordarse, la lluvia amenaza con inundar. La gente va,  camina con la cabeza entre los hombros, con el cuello encogido y los ojos achinados para no hacerle frente al viento. Abrigados, solitarios, estación de mucho silencio, de hablar poquito y necesario, que el aire frío no lastime la garganta.
Meterse para adentro. Poco sexo, da pavor desnudarse. Mucha comida caliente, salsosa, espesa, que haga transpirar, que invite al vaso de vino. Dormir arropado, muy tapado, hasta las sienes. Si es posible con compañia, entrecruzando los pies, calentarse mutuamente. Tocarse, tocar, que lindo verbo. Mimar, hacer un mimo, bien impagable. Abrir la boca y acariciar con la palabra, decirle al otro, anhelo. La compañia, la palabra, la mano que toca, el cuerpo que recibe, las sábanas que se calientan despacito. Ahora, quizás, el sexo es posible. Es la culminación concreta de un devenir inesperado en la mañana de frío del hermoso día de invierno en que tomaste estas fotos e imaginaste.

sábado, 3 de julio de 2010

Grandeza























Hay una frase que se le adjudica a Bertold Brecht creo, que dice:

"Hay hombres que luchan un día y son buenos. Hay otros que luchan un año y son mejores. Hay quienes luchan muchos años, y son muy buenos. Pero hay los que luchan toda la vida, esos son los imprescindibles"

Estos dos hombres,  que están llorando en la foto, lucharon toda su vida para ser los mejores y a una edad muy temprana, a los veintipico, lo lograron. Tuvieron el reconocimiento del mundo entero. Y tienen millones y futuro asegurado para toda su familia y descendientes. Lloran porque perdieron a la pelota. Por algo tan simple y tan grande como eso.
Nosotros que somos comerciantes de un barrio, o empleados públicos de cualquier repartición pública, aspirantes a escritores o periodistas, profesionales del montón de la manada, tengamos grandeza y respetemos. Y demos las gracias. No nos dejemos llevar por mensajeros que un día dicen una cosa y a la siguiente otra. Que pronosticaron la semana pasada la decadencia del futbol europeo y hoy tenemos a tres países de ese contiente entre los cuatro semifinalistas. A los falsos nacionalismos. A los que creen que defender la patria es ganar un mundial.
Demos las gracias por tener dos tipos, que juegan para nosotros, que llegaron a ser los mejores entre todos los de su especie y lloran por algo tan simple como perder un partido a la pelota. 
Como los chicos del barrio.
Gracias por tanta grandeza. Por suerte son argentinos.


Foto: El Pais.com (España)